martes, 27 de agosto de 2013

SOLO PARA MUJERES Cap. 5



Cap. 5

Me encontraba frente a la puerta del local.

Una sonrisa aparecía en mi rostro...me sentía bien.

Me miré, la verdad estos vaqueros me sentaban muy bien y el top un poco atrevido, pero esta noche quería pasármelo bien.

Yohana, si quería seguir sabiendo de mí, ya sabía donde podía encontrarme.


Dentro del local me esperaban mis amigos.

En la barra Luis, Alfonso y Lucas.

Y bailando como siempre se encontraban Vanessa, Fani, Carol y Gemma.

Me acerqué a los chicos, los cuales me hacían señas con las manos.

A.- Hola Chicos, ¿Cómo está el ambiente hoy por aquí?

Lucas.- Primero un beso chica, que para verte ahí que pedir cita......¡¡¡uyyy perdón!!!

Lucas era uno de mis amigos que sabían de mi "trabajo".

Dados los besos en cuestión, comenzamos a hablar, entre el barullo de gente y la música, apenas nos enterábamos de nada.

Luis.- Alexandra ¿qué te pido?

A.- Ron con coca cola, por favor.

Luis.- Echo, preciosa.

Apoyé mi espalda a la barra, miraba divertida a las chicas, las cuales aún no se habían percatado de mi llegada.

Pero....con ellas había otra chica, no sé, creía conocerla, hasta que sus ojos se encontraron con los míos.

Era Gabriella....me quedé muda, un escalofrío recorrió todo mi cuerpo, estaba bellísima.

Aparté la mirada y cogí mi ron.

En ese momento se acercaba Gemma sonriente.

Gemma.- Alexandra no te vi llegar, vamos deja el vaso y ven a bailar.

La verdad, no quería acercarme, ver a Gabriella en este sitio y con las chicas.

Mi cabeza empezó a batallarme con preguntas, ¿Gabriella era?, ¿desde cuando conocía a las chicas? ¿sabría de mí?...
Sin dejarme tiempo a reaccionar Gemma tiró de mí, hasta llegar a ellas.

Gemma.- Mira te presento a.....-dijo dirigiendose a Gabriella-

Ya nos conocemos-dije yo.

Gemma.- me miraba sorprendida.-¿y eso? ¿os conocéis?

A.- Sí, trabaja en mi Boutique.... para que veáis el tiempo que lleváis sin hacerme una visita.

F.- Cariño, tu tienes precios que nosotras no podemos pagar.

Gemma.- se dirigió a Gabriella - Gaby....¿cómo te trata nuestra amiga?.

Gabriella.- Bien, muy bien, no tengo queja.

Gemma.- Ya y que vas a decir, teniendo a tu jefa delante. Alexandra espero que la trates bien, es una chica estupenda.

A.- Lo sé....lo sé......

Estaba atontada, esos ojos me hipnotizaban, las palabras apenas salían de mi garganta.

Las dos nos mirábamos sorprendidas, estar en aquel sitio daba que pensar.

Pusieron música lenta y empezaron a emparejarse.

Gemma cogió a Vanessa, abrazándola por la cintura y guiñándonos un ojo, hundió su cara en el cuello de Vanessa.

Fani y Carol, lo mismo......aunque ellas no perdían el tiempo, sus bocas se juntaron al son de la música.

Lucas y Luis agarrados de la mano, salían también, me encantaba verles bailar, sus movimientos eran muy provocadores.

Sólo quedábamos Alfonso, Gabriella y yo, que los mirábamos desde la barra.

Alfonso.- Gabriella, ¿tú no tienes pareja?

Gabriella.- No, en este momento no, estoy sola.

Una sensación de tranquilidad invadió mi cuerpo, pero....¿qué me estaba pasando?

Alfonso.- ¿Y tú Alexandra? ¿tienes pareja?

A.- Alfonso, estas tú muy cotilla esta noche ¿no?....pero no, no tengo pareja.

A Gabriella se le escapó un suspiro.

No sé, pero quería decirlo, quería que Gabriella lo supiera.

Aunque ¿porqué?, en mi vida había un lado que no podía salir a la luz.

La canción terminó y todos se reunieron con nosotros en la barra.

Gabriella se acercó a mí para dejar sitio, el roce de su piel me erizó la piel y su perfume......¿qué me estaba pasando?

A la mañana siguiente, me levanté temprano, no había podido dormir bien, pensando en Gabriella.

El roce de su piel, sus ojos mirándome....

Me fui al Gimnasio, no quería pensar, además de que no podía descuidar mi aspecto físico por mi "trabajo".

Llevaba 15 minutos en bicicleta, cuando noté que alguien me observaba, había poca gente, por lo que no fue difícil descubrir quien era.

El corazón me dio un vuelco.....era Gabriella.

La saludé y seguí con lo mío, empecé a ponerme nerviosa, mis pulsaciones habían subido a 190.

Puse la bicicleta en recuperación y a los 5 minutos salía de la Sala de Fitnnes.

Curiosamente, ya no se encontraba en la sala.

Mejor así, iba pensado camino a los vestuarios.

Me quedé en bañador y me fui a a la Sauna, allí estaba ella.

Me senté a su lado y comenzamos a hablar, nada en particular, las dos estábamos cortadas.

Salimos al mismo tiempo de la Sauna y nos dirigimos a las duchas.
Había chicas duchándose e hicimos cola.

Dos duchas quedaron vacías y sin mediar palabra nos dirigimos a ellas.

A.- ¡¡¡Mierda!!!!!

Me tapé la boca, esperando que no me hubiesen escuchado.

G.- ¿Alexandra? ¿te pasa algo?

Salí de la ducha con la toalla enroscada en mi cuerpo, Gabriella tenía la puerta medio abierta.

G.- ¿Qué te pasa?

A.- Me he quedado sin gel y estoy a medio duchar.

G.- Entra conmigo, yo tengo suficiente......

A.- ¿Seguro?

G.- Venga Alex, no me dirás que nunca has visto el cuerpo desnudo de una mujer.

¡¡Alex!! nunca nadie me había llamado así. No me quedó mas remedio que entrar en la ducha.

El hecho de ver su cuerpo desnudo y el agua cayéndole sobre el, hizo que me excitara.

Me quité la toalla y Gabriella......vi que sonreía.

G.- Toma el gel.

Se rozaba con mi cuerpo enjabonado, provocandome.

Mis pezones se pusieron erectos, sentía deseos de tocarla, de poseerla.

G.- ¿Quieres que te ayude?

A.-¿Cómo?

G.- A quitarte el jabón digo...el pelo..todavía tienes jabón.

A.- Si no te importa...

Ya no pude más, acerqué su cuerpo al mio y comencé a besarla, a deslizar mis manos suavemente por su piel.

Su boca era sabrosa, envolvente, su lengua....

Gabriella bajó a mi pecho, su lengua jugaba con mi pezón, se lo introducía en la boca, excitándome cada vez mas.

Me apoyó contra la pared y siguió bajando por mi cintura, hasta llegar a mi sexo, haciéndome abrir más mis piernas y apoderándose de el con su boca.

Me lamía, succionaba mi clítoris, su lengua jugueteaba con él cada vez mas deprisa, hasta que me hizo llegar al orgasmo.

La hice mirarme, sus ojos reflejaban deseo.......y así no iba a dejarla.

le cogí con ambas manos su cara, la atraje hasta mi boca y seguí besándola.

Su cuello, hombro, pechos, vientre.......iba saboreando toda su piel que me encontraba por el camino que me llevaba a su sexo, yo también tenía sed de ella.

Salimos de la ducha como si no hubiera pasado nada.

En los vestuarios, se quitó la toalla para vestirse, su cuerpo era magnífico, esas curvas.........
 
Una vez vestidas, nos despedimos en la puerta del Gimnasio.

Al día siguiente la vería en la Boutique, pero quería saber de ella.....esa chica hacía que algo en mi interior emergiera...creo que me estoy enamorando.

Esa misma tarde fui a visitar a mi amiga Gemma, ella la conocía y quería saber mas detalles.

Subía las escaleras impaciente y a la vez nerviosa, sabía que Gemma se iba a reír de mi, siempre le había dicho que no volvería a enamorarme y ella siempre repetía lo mismo “tiempo al tiempo”.

Toqué al timbre, no abría, me empecé a impacientar más, hasta que escuché una voz desde el otro lado de la puerta.

Gemma me abrió con un albornoz puesto.


 A.- Buenas tardes Gemma, ¿puedo pasar?.

G.- Claro...pasa, ¿qué te ocurre?.

A.- Me pongo una copa, mientras te vistes y hablamos, ¿te parece bien?

G.- Sí claro, me estás preocupando. Vuelvo enseguida.

Gemma salió de la habitación con un chándal  y se sentó a mi lado en el sofá.

G.- Venga, habla...

A.- Quiero que me hables de Gabriella....

G.- ¡¡¡Eso era!!!, hija me habías asustado....Mmmm...Gabriella, ¿quién es esa?.

Se levantó del sofá poniendo cara dubitativa, a la vez que comenzó a reír a carcajadas.

A.- Lo sabía, sabía que harías eso, que te reirías de mí.

Le tiré un cojín que Gemma cogió al vuelo.

G.- Vale....-limpiándose las lágrimas- vale, no me río. No me dirás que Gabriella te gusta..., porque lo tienes crudo con ella. Buscate a otra cariño, esa chica es un hueso duro de roer y te aseguro que no vas a conseguir nada de nada con ella.

Yo bajé mi cabeza, sonrojándome...

A.- Yo no estaría tan segura....

G.- ¿Cómo?, no me digas que tú y ella, ¿cuando?, ¿cómo?, ¿dónde?.

A.- He venido a hacerte unas preguntas yo a ti, no a que tú me hagas un interrogatorio.

G.- De acuerdo, si tú me cuentas, yo te cuento.

A.- Esta mañana en el Gimnasio he hecho el amor con Gabriella.

G.- Me dejas sin palabras, nunca lo hubiera imaginado.

En ese momento sonó el teléfono.

Gemma.- Era Gabriella, quiere hablar conmigo...he quedado con ella mañana.Se vé que esto es serio, bueno, hablemos...

Gemma se sentó a mi lado.

G.- A ver, por donde empiezo.A Gabriella la conocí el primer día de Universidad, las dos congeniamos enseguida y nos hicimos muy amigas.

A.- Nunca me habías hablado de ella...

G.- No sé, quizás, porque nunca imaginé que volvería a la ciudad.

A.- ¿Que pasó?.

G.- En segundo curso, Gabriella se enamoró de una chica, amor correspondido, pero...digamos que en su clase social, no estaba bien visto que fuera lesbiana.

>Ella ante sus amigos no lo escondía, pero a sus padres sí.

>El caso es que su padre las pilló en su habitación besándose y ese fue el final de su relación con Merche.

>Su padre muy estricto y por el que dirán, la envió a Londres, para que acabara sus estudios allí.

>Antes de marcharse, Gabriella le hizo una promesa a Merche, le prometió que en cuanto terminara volvería a por ella y que no se separarían más.

>Una vez que regresó, fue a buscar a Merche, pero ésta, le dijo que había sido un amor de juventud, una locura y que ahora estaba feliz con un chico.

>Gabriella quedó desconcertada y juró no volverse a enamorar.
Se rebeló contra sus padres y volvió a Londres. Allí ha estado hasta hace unos 6 meses, nunca perdimos el contacto.

A.- ¿Y? ¿en amores?...

G.- Que yo sepa, ha tenido rollos, pero enamorarse no, es muy cabezota.

>Vamos, yo creo que hasta os parecéis un poquito. Esas ganas de luchar por vosotras mismas..... vamos creo que si...

>Cariño, pero tu tienes, digamos “un lado oscuro”, ¿cómo le hablarás de ello?.

A.- Siempre he pensado que cuando se ama a alguien, se hace desde ese día, el ayer no importa.....si ella...si ella estuviera conmigo lo dejaría.

G.- Pero también es mayor que tu...

A.- ¿Qué? ¿y que importa la edad cuando se ama?....no me pongas excusas, aunque no sé como lo voy a hacer para no defraudarla.
Bueno Gemma, no te doy mas la lata, gracias por todo...

Gemma se abrazó a mi.

G.- Eres tonta, creo que nunca te he fallado, en mi siempre tendrás una amiga y que nunca te he juzgado, lo sabes bien....

A.- Lo se. Otra cosa...si mañana Gabriella saca mi nombre a relucir, hablale bien de mi....de lo malo, si hay alguna oportunidad entre ella y yo, se lo contaré personalmente.

G.- Venga vete...tira....tonta, mas que tonta....si eres un cielo.

Nos despedimos con un abrazo.

A la mañana siguiente me desperté antes de que sonara el despertador, estaba impaciente por ver la cara de Gabriella.

Me duché, desayuné y salí a la calle a toda prisa.

Todavía quedaba 1 hora para la apertura de la Boutique. Gabriella es la encargada de abrirla.

15 minutos antes, ya rondaba yo por la calle, viendo si aparecía....hasta que vi su silueta, una sonrisa de oreja a oreja floreció en mi cara, me encontraba radiante.

Sigilosamente me acerqué a ella, por su espalda y le susurré “Buenos días”, ella se puso tensa y al girar la cabeza y ver que era yo, suavizó sus rasgos.

G.-¡ Buenos días! Alexandra, no pensé verte tan temprano por aquí.

A.- Tenía que supervisar unos papeles y....

Me quedé con la palabra en la boca, se acercaba a nosotras mi otra dependienta, así que sólo le guiñé un ojo. Gabriella me devolvió una sonrisa.

No había pasado ni una hora de la apertura, cuando Yohana, se presentó , venía con gesto serio.

Desde los cristales de mi despacho pude verla.

Vi que hablaba algo con Gabriella y se dirigía a mi despacho, cerré la cortina de la ventana y no hizo falta abrirle la puerta, entró dando un portazo.

Y.- Hola Alexandra...¿sabes?.....me quedé esperándote el sábado por la noche.

A.- Tuve otros planes...¿algún problema?, ¿te debo algo?, deberías de respetar un poco mas mi negocio, no es manera de entrar...

Y.- ¿Pero tú que te crees?, ¿tan buena te crees que eres?....estúpida, te podía haber echo llegar alto.

A.- Si no te importa, por favor, sal de mi despacho, no quiero volver a verte más.

Y.- Eres una....

Abrí la puerta, invitándola a salir.

Yohana hecha una furia salió gritando.

Y.- ¿Sólo se puede hablar contigo si te pago?, ¿tengo que pedir cita?.......

Mis empleadas la miraban con asombro y desconcierto.

Cuando salió, Gabriella y yo nos miramos.

Su mirada se clavó en mí, volví al despacho no sin antes girar mi cabeza, aún seguía mirándome, cerré la puerta, me quedé ahí toda la mañana.

¿Que pensaría Gabriella?, todo se estaba acelerando....


2 comentarios:

  1. Vaya. De nuevo te extiendes en tu historia ampliando los personajes pero sin soltar el hilo erótico que tanto me gusta.
    Me tienes intrigado por saber como va a seguir Alexandra con su vida.

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  2. Bueno esto sigue muy bien.. tiene sus momentos eroticos ... buena historia .. ya veremos que piensa gabriela ... te felicito muy buena historia...

    Diana

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